Demanda mundial de cobre y los factores que incidirían durante el 2022-2023

La Comisión Chilena del Cobre (Cochilco) emitió su Informe Tendencias del Mercado del Cobre Proyecciones 2022-2023, donde da a conocer el posible escenario de la demanda mundial de cobre.

Aunque, el informe arranca con un balance de lo sucedido el año 2021, donde la demanda por el metal rojo en el mundo tuvo su principal impulso en la recuperación económica del mundo; sobre todo, en los cinco países consumidores de cobre, como China (+8.1%), Estados Unidos (+5.6%), Eurozona (+5.2%) y Japón (+1.7%). En efecto, solo este grupo concentró más del 80% del consumo mundial de cobre el año pasado.

No obstante, en los años inmediatos a 2021, se espera una desaceleración en el crecimiento económico de 4.1% en 2022 y 3.2% en 2023.

Y tomando ello como base, la demanda mundial de cobre se atenuaría, aproximadamente, un punto porcentual; pues, del 3.4% registrado en 2021, pasaríamos a 2.1% en cada año siguiente.

China, un jugador importante

Dichas cifras, en cantidades, se traduce en una demanda de cobre refinado de entre los 25 y 25.6 millones de TM. Y la razón principal para esta menor demanda frente a la de 2021, la hallamos en la desaceleración en el consumo cuprífero de China.

Aunque, China continuaría contribuyendo con una fracción significativa del volumen incremental anual del consumo de cobre. Recordemos que, en 2021, su consumo llegó a 268 mil TM, pero en 2022 y 2023 se reduciría a 137 mil y 110 mil TM, respectivamente, con lo que reduciría su cuota de participación en la demanda de cobre mundial.

De hecho, su consumo incremental bajaría de 31% en 2021 a 21% en el año 2023.

Mientras tanto, se espera que el resto del mundo expanda su consumo a razón promedio de 2.1% al año. Sobre todo, se proyecta un crecimiento en países con baja participación en el consumo del cobre, como la India.

Factores que inciden en la proyección de la demanda mundial de cobre

Ahora, dentro de los factores que determinarán el desempeño de la demanda de cobre a nivel mundial en 2022, Cochilco identifica los siguientes:

• La aparición de nuevas variantes del Covid-19.
• Desaceleración del crecimiento económico de China.
• La incertidumbre sobre la velocidad del alza de tasas de interés por parte de la FED en Estados Unidos.
• Conflictos geopolíticos, como la actual tensión entre las potencias occidentales, Europa y Estados Unidos, y Rusia.

Entonces, de darse algún cambio brusco o no anticipado en alguno de ellos, la demanda de cobre en el mundo podría variar considerablemente.