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La vacuna contra covid-19 no exime el uso de mascarilla

Expertos recomiendan mantener medidas sanitarias aun vacunados.

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La vacuna contra covid-19 no exime el uso de mascarilla

La llegada y aplicación de la vacuna contra la covid-19 permitirá, de manera paulatina, que la normalidad vaya instalándose, de nuevo, en nuestra vida diaria. Sin embargo, aun vacunados, no tenemos permitido bajar la guardia; pues todavía existe riesgo de contraer y propagar el contagio entre quienes no hayan recibido la vacuna.

Así lo afirman diversos expertos en ciencias de la salud, quienes basan su opinión en que, hasta el momento, ningún estudio científico ha demostrado que las personas vacunadas no transmiten la enfermedad.

Además, las vacunas desarrolladas por diferentes laboratorios, como AstraZeneca, Pfizer y Moderna, tienen fórmulas de eficacia contra la covid-19 desde el 76% al 90%. Eso quiere decir que los vacunados aún pueden contraer el virus, y aunque en ellos no surta ningún efecto, sí puede contagiar a otros que no cuentan con las dosis.

Por eso, los expertos recomiendan que los vacunados mantengan el uso de mascarillas de manera obligatoria; al igual que las demás medidas sanitarias ya conocidas, como el lavado de manos y el respeto al distanciamiento social.

De hecho, mencionan que estas medidas deben prevalecer entre la población hasta que se alcance la inmunidad de grupo. Es decir, hasta que el 70% de la población tenga la vacuna contra la covid-19.

Conociendo los anticuerpos

De todos modos, resulta válido preguntarse por qué la vacuna no detiene la transmisión del virus. Y para hallar la respuesta a ello, debemos saber los dos tipos de anticuerpos que puede producir nuestro organismo.

El primero es el tipo IgA, asociado a las mucosas, y el segundo es el IgG que se encuentran en número más abundante, y son los que mejor protegen contra los virus y bacterias, según explica el Instituto de Salud Global de Barcelona.

“Las vacunas que están actualmente aprobadas y se están administrando a la población generan una respuesta de anticuerpos de tipo IgG contra la covid-19; y básicamente evitan el desarrollo de formas graves de la enfermedad. Sin embargo, no impiden que, si nos exponemos nuevamente al virus, podamos infectarnos; ya que no evitan la replicación del virus en el tracto respiratorio superior. Para ello serían necesarias vacunas inhaladas que generen inmunidad en las mucosas”, señala Carmen de Mendoza, profesora del Área de Ciencias de la Salud de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR).

Se necesita desarrollar vacunas contra covid-19 con anticuerpos IgA

Mientras tanto, el Dr. José Navarro, de la Asociación Española de Vacunología (AEV), ahonda en la explicación anterior sobre las vacunas contra la covid-19.

“Las vacunas frente al SARS-CoV-2 inducen la producción de anticuerpos IgG que reaccionan con rapidez a cuerpos extraños y se encuentran confinados en partes de nuestro organismo que no tienen contacto con el mundo exterior, como en músculos o en la sangre. Pero para evitar la transmisión de la covid-19, otros tipos de anticuerpos podrían jugar un papel más relevante. El sistema inmune que patrulla por las superficies mucosas que podrían tener contacto directo o indirecto con el exterior -nariz, garganta, pulmones y aparato digestivo- recae en las inmunoglobulinas IgA, y desconocemos hasta qué punto las vacunas ya comercializadas contra la covid-19 desencadenan respuestas de anticuerpos IgA”.

Superada la enfermedad, ¿aún se puede contagiar?

Otro caso es el de las personas que, sin recibir la vacuna, ya superaron la enfermedad. Pues, se sabe que este grupo de personas desarrolla una gran cantidad de anticuerpos IgA. Por ello, se puede esperar que este grupo ya no disemine el virus.

Sin embargo, el doctor Navarro sostiene que esa situación no puede replicarse en el caso de los vacunados.

De la misma opinión es Yvelise Barrios, vocal de la Sociedad Española de Inmunología. “Probablemente, las personas que se vacunan contra la covid-19 tengan una replicación menor del virus y van a contagiar menos; pero eso no lo podemos saber aún. Insistimos en que se mantengan las medidas de seguridad porque hay una falta de información que nos obliga a ser prudentes”.

Además, explica que “un vacunado genera una respuesta inmune sistémica; pero el SARS-CoV-2 entra por las vías respiratorias superiores, y la inmunidad de las mucosas en estas zonas funciona de una manera diferente, pero aún no está probado que sea suficientemente potente con la vacunación como para impedir que nos contagiemos y que además podamos transmitir. Tenemos esta pequeña duda conceptual que iremos resolviendo en los próximos meses”.

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