Minería de tierras raras y la propuesta de Hochschild

Hochschild y universidad chilena trabajan en proyecto de minería de tierras raras

Biolantánidos, una subsidiaria de Hochschild Mining, presentó las conclusiones del proyecto Fondef, de la Universidad de Santiago de Chile, que desarrolla un nuevo método de adsorción para la minería de tierras raras.

Mediante este proceso, se busca crear una matriz de adsorción, que permita filtrar lantano y cerio, por ejemplo, a fin de cubrir la alta demanda de estos elementos en la industria tecnológica.

“Es relevante que hoy en Chile se genere un grupo de expertos y un debate científico en torno a las tierras raras; que se realicen investigaciones y avances que ayuden en el desarrollo tecnológico para la industria; más aún si es en la separación de los elementos que la componen”, señala Denis de la Fuente, subgerente de Ingeniería de Biolantánidos, sobre el proyecto de minería de tierras raras.

“Esto nos permitirá hacer pruebas y analizar un potencial uso para futuras etapas que debemos alcanzar como compañía”, explicó.

Asimismo, De la Fuente presentó el proyecto BioLantánidos de la comuna de Penco, en Chile. Aunque, todavía se encuentra en una fase de evaluación ambiental, pero se sabe que contempla la construcción de una faena minera que procesará maicillo rico en tierras raras.

Proceso pionero

Vale destacar que el desarrollo de este proyecto es el primero de su tipo en Chile. Incluso, se trata de un proceso productivo de minería de tierras raras pionero en el mundo; ya que no utiliza procedimientos tradicionales, como la tronadura ni el chancado, además de no dejar residuos industriales líquidos.

El desarrollo de este proyecto está a cargo de la Universidad de Santiago de Chile, bajo la dirección del Dr. Jaime Pizarro, y cuenta con el apoyo de la Fundación Tecnológica de Sonami y Biolantánidos. Cabe precisar que estas empresas aportaron conocimiento y muestras para las pruebas.

“Nuestro proyecto es una nueva forma de hacer minería de tierras raras, de manera sostenible y con bajo impacto”, explicó De la Fuente. “Permitirá ampliar la matriz exportadora de Chile, posicionándolo como un actor clave en la industria. El uso de tierras raras es esencial para la electromovilidad, la generación de energías renovables y el desarrollo de la industria tecnológica”.

Respeto por el medio ambiente

En cuanto al desarrollo del proyecto en sí, este consiste en recursos de arcilla iónica, similares a los que se halla en China. Sin embargo, se diferencia de otros proyectos de tierras raras en el mundo, al no basarse en rocas duras.

Además, en este proceso de minería de tierras raras, la mineralización ocurre desde la superficie hasta 20-30 metros de profundidad. Por ello, no requerirá explosivos.

Asimismo, la arcilla se somete a un proceso de lavado simple en el que las tierras raras se desorben en una solución, se concentran y se calcinan, lo que da como resultado un óxido de tierras raras.

Por último, no requiere de una presa de relaves, pues se espera que la arcilla lavada regrese a los pozos abiertos.

Un dato que no se puede dejar de mencionar es que este proyecto de minería de tierras raras es respetuoso con el medio ambiente; ya que no utiliza productos químicos potencialmente dañinos. Y su gasto operativo y de capital sería bajo, logrando posicionarse como uno de los procesos de menor costo de su tipo.