Medio Ambiente
Proyecto de ampliación Toromocho etapa II “no admitido”
Senace declaró no “admitido” la modificación del EIA de proyecto.
Proyecto de ampliación Toromocho etapa II “no admitido”
La segunda etapa del proyecto de ampliación Toromocho tardará más tiempo que el previsto; pues el Servicio Nacional de Certificación Ambiental (Senace) declaró como “no admitido” la Modificación a su Estudio de Impacto Ambiental.
En principio, el Ministerio de Energía y Minas había previsto que el inicio de las obras para la ampliación de la mina ubicada en Junín comenzaran en abril. Sin embargo, con la respuesta negativa del Senace, la expansión de la Unidad Minera Toromocho a 170 000 TPD tendrá que esperar.
En el documento que presentó Chinalco este mes, se detallaban las diversas obras para el proyecto de ampliación Toromocho. Por ejemplo, la preparación de áreas donde se instalará una nueva chancadora primaria; así como la ampliación de la infraestructura de procesamiento de la planta concentradora.
También, el expediente M-MEIAD-0049-2020 incluía la construcción de un nuevo camino de acceso a la mina, entre otros.
El yacimiento de pórfidos de cobre Toromocho se ubica en los distritos de Morococha y Yauli. Actualmente, se le considera como uno de los depósitos de polimetales más importantes del Perú.
La compañía de capitales chinos, Chinalco administra Toromocho desde 2007. Y a pesar la no admisión a la II etapa de la ampliación del proyecto Toromocho, ha logrado hechos importantes hasta el momento. Por ejemplo, la expansión de la unidad minera, en agosto del año pasado, donde se hizo la transferencia parcial de la fase I del millonario al área de Operaciones.
Planes a futuro
Por otro lado, Chinalco también tiene planes de convertir al yacimiento en una unidad minera subterránea. Así lo dio a conocer el gerente de Mina y Servicios Técnicos de Chinalco, Luis Ticona Condori, recientemente.
Aunque, precisó que “eso es a futuro, porque tenemos muchas reservas para muchos años”.
Igualmente, la compañía también planea integrar el uso de motores con conversión de hidrógeno y la implementación de un sistema de gestión de stocks de mineral, entre otros. Pero, por ahora, seguirá a la espera de la admisión de la II etapa de ampliación del proyecto Toromocho.
