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Minería

Revolución verde impulsará la demanda de cobre, zinc y níquel

La revolución verde representó menos del 5% de la demanda mundial de cobre en 2020.

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Un informe del investigador de mercado CRU Group pronosticó que la revolución verde impulsará la demanda de cobre, zinc y níquel en las siguientes dos décadas.

De acuerdo al reporte, el incremento de la demanda provendrá particularmente de China, donde el estímulo gubernamental puede llevarla a niveles incluso más altos de lo pronosticado antes de la pandemia

sin embargo, anotó la consultora, el resto del mundo seguirá trabajando para recuperar las pérdidas del año pasado, especialmente porque el covid-19 continúa como riesgo clave a corto plazo en los países en desarrollo.

En el informe elaborado, la consultora señaló que, pese a representar menos del 5% de la demanda mundial de cobre en el año 2020, la revolución verde puede arrojar algunos golpes sorpresa e impulsar la demanda del metal rojo y del níquel más allá de lo esperado.

De hecho, los cálculos de CRU prevén que el consumo global de cobre de las energías renovables aumentará de 700.000 t / a en 2020 a 1,8 Mt / a en 2030, impulsado por aplicaciones en instalaciones de energía eólica y solar, vehículos eléctricos y nueva infraestructura eléctrica.

Mayor demanda de zinc

Según la consultora, la demanda de zinc también podría beneficiarse de las energías renovables en los próximos años porque la energía marina es uno de los sectores de energía limpia más intensivos en zinc y está previsto que crezca rápidamente en las próximas décadas, aunque desde una base pequeña.

Específicamente, se espera que la energía solar represente una porción cada vez mayor de la demanda de zinc refinado en el futuro porque el metal se usa comúnmente en paneles solares que se montan en marcos de acero galvanizado y cubren vastas áreas.

El zinc también es el componente clave de algunas baterías a gran escala, cuyo mercado actual es pequeño pero, en opinión de CRU, tiene el potencial de convertirse en uno de rápido crecimiento, lo que se suma a la demanda general de zinc relacionada con las energías renovables

Revolución verde: unidades eléctricas

Al observar el papel de los vehículos eléctricos en la demanda de metales básicos, el informe prevé que la demanda mundial de cobre relacionada con los vehículos eléctricos aumentará de alrededor de 300.000 t en 2020 a más de 4 Mt en 2040.

La predicción se basa en el hecho de que, a pesar de la pandemia, 2020 parece haber sido un punto de inflexión para la industria de vehículos eléctricos, con las ventas europeas de plugins eléctricos rompiendo la barrera del millón de unidades.

Cuando se trata de cobre, los fabricantes de vehículos eléctricos tienden a incorporar el metal en sus diseños, con una intensidad de uso de alrededor de 80 kg por vehículo, que es hasta cuatro veces más que para un motor de combustión interna estándar.

El sector de las baterías también se considera un importante consumidor de níquel en los próximos años, y representará casi el 60% del crecimiento de la demanda de níquel hasta 2040. Este aumento se producirá como resultado de la creciente penetración de los vehículos eléctricos en el sector de la automoción, que utilizan níquel. baterías intensivas.

También el níquel

Además se espera que el níquel se beneficie de la química de las baterías de litio-níquel-manganeso-óxido de cobalto (NMC) consolidando su posición como el “estándar de la industria”, considerando que proporcionan densidades de carga más altas que sus contrapartes sin níquel.

El único “pero” en esta predicción es que las químicas de las baterías de litio-hierro-fosfato (LFP) tienen más participación de mercado de lo que preveía la industria, particularmente en el sector BEV chino.

“ LFP es un riesgo para el níquel , y varios OEM occidentales han realizado inversiones en tecnología LFP. Si la participación de LFP es mayor de lo que pronosticamos, la necesidad de nueva capacidad de níquel será menor a largo plazo ” , se lee en el análisis . “Existen riesgos tecnológicos a largo plazo que podrían desplazar a las baterías NMC, alejando el uso de baterías intensivas en níquel. Estas tecnologías parecen estar al menos a una década de distancia, pero podrían sorprender al alza “.

Otras amenazas

En opinión de CRU, el zinc enfrenta desafíos debido a la tendencia hacia el peso ligero de los vehículos, que comenzó cuando los fabricantes de automóviles intentaron cumplir con regulaciones de emisiones más estrictas y que continuarán en su objetivo de maximizar el rendimiento de la batería de EV.

“Si bien la sustitución del acero galvanizado por láminas de aluminio para automóviles todavía se limita principalmente a los vehículos de alta gama, la tendencia continuará reduciendo la demanda de zinc relacionada con los automóviles”, afirma el documento de la empresa.

El aluminio también se considera una amenaza para el cobre, debido al aumento de las raciones de precios, lo que ha llevado a un crecimiento en el mercado de aluminio primario de 15 Mt a casi 65 Mt, mientras que el mercado del cobre refinado solo ha aumentado de 10 Mt a 23 Mt.

CRU señala que, además de lo anterior, el aluminio tiene una alta puntuación en el sector de los vehículos eléctricos, no solo en términos de costo, sino también debido al potencial ahorro de peso. Sin embargo, una cosa juega a favor del cobre: ​​el hecho de que el área de la sección transversal del aluminio debe ser un 50% mayor que la del cobre para el mismo nivel de conductividad.


 

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